La primera mención que tenemos constancia y donde se cita por primera vez Rennes-le-Château en relación con el tesoro[ref]Existen un par de artículos anteriores, el primero en 1913 y un segundo en 1928 de este mismo autor que hablan de Rennes-le-Château, pero solo hacen referencia a él como un pueblo turístico y algo pintoresco, nunca mencionan ningún tesoro encontrado por un cura.[/ref] de Saunière se la debemos a Jean Girou, quien realizó un libro llamado “L’itenéraire en terre d’Aude“. En este libro, publicado en 1936, tendrían que pasar 12 años (1948) más para encontrar un nuevo artículo que hable de RLC, aunque en este caso no hay mención alguna al tesoro. En el libro de Girou se hace mención varias veces a Rennes-le-Château como “Redhae“, la famosa capital visigoda y encontramos el siguiente párrafo:
“A la sortie de Couiza, une route monte vivement à gauche, c’est le chemin de Rennes-le-Château, sur l’arête du plateau, se découpe un décor singulier: des maisons en ruine, un château féodal délabré, surplombent et se confondent avec la falaise calcaire, puis des villas, des tours à véranda, neuves et modernes contrastent étrangement avec ces ruines: c’est la maison d’un curé qui aurait bâti cette demeure somptueuse avec l’argent d’un trésor trouvé, disent les paysans!”
“A la salida de Couiza, un camino sube bruscamente a la izquierda, es el camino de Rennes–le-Château, en el borde de la meseta, se recorta un decorado singular: las casas en ruinas, un castillo feudal ruinoso, fusionado con los acantilados de piedra caliza y villas, torres con miradores, lo nuevo y moderno contrasta extrañamente con las ruinas: esta es la casa de un sacerdote que había construido esta suntuosa casa con dinero de un tesoro encontrado , ¡dicen los paisanos!“